La visión utilitarista de algunas notas sobre la nacionalidad para los descendientes.

Es lamentable la cantidad de notas periodísticas, como las declaraciones del Sr. Nespral, Presidente del Centro Asturiano de Buenos Aires, ( Leer ) o esta otra ( Leer ) que intentan dar una visión utilitarista y mercantilista sobre el por qué los nietos deseamos obtener la nacionalidad de nuestros abuelos y en muchos casos padres y hasta hermanos menores, olvidándose sistemáticamente de valores como Identidad, Cultura y Tradición. Pero además, se niegan a decir que la Ley 52/2007 beneficia fundamentalmente a los nietos del abuelo varón emigrante (la mujer no transmite la nacionalidad hasta el año 1978, salvo que fueran madres solteras o que el hijo / hija no fuera reconocido por el padre) sin importar si este abuelo emigró entre julio del 36 y diciembre del 55.

La realidad es que desconocen, que desde hace 30 años el Código Civil en materia de nacionalidad, nos discrimina negativamente a los nietos de españoles emigrantes.

Con esto estoy diciendo, que cuando yo comencé a intentar obtenerla, (hace 20 años) desde mi sentir, España era la misma España de hoy, pero, si NO nos permitían obtener la nacionalidad qué podía hacer yo. Todavía recuerdo las palabras del entonces Ministro de Trabajo Jesús Caldera cuando en un cruce, me llegó a decir que no podía haber dos millones de nuevos votantes (año 2006) y hoy tenemos ya en vigencia la ampliación, porque el PSOE cambió su postura ante nuestro reclamo y entendió que NO todos los descendientes se querían ir a vivir a España.

También debo decir, que nuestro cálculo en cuanto a potenciales adquirientes, jamás superó los 500.000 descendientes en todo el mundo, mientras que muchos políticos llegaron a hablar de hasta tres millones, un despropósito.